1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

CTXT necesita 15.000 socias/os para seguir creciendo. Suscríbete a CTXT

ANÁLISIS

¿Por qué ha abandonado Trump el Consejo de Derechos Humanos?

La defensa de Israel, la protección de sus grandes empresas y el rechazo al demoledor informe Alston explican la espantada de EEUU

Adoración Guamán 27/06/2018

<p>Varias granadas de gas caen sobre manifestantes palestinos en las protestas de Gaza contra la apertura de la embajada de EE.UU en Jerusalén. (14 de mayo de 2018)</p>

Varias granadas de gas caen sobre manifestantes palestinos en las protestas de Gaza contra la apertura de la embajada de EE.UU en Jerusalén. (14 de mayo de 2018)

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

CTXT es un medio financiado, en gran parte, por sus lectores. Puedes colaborar con tu aportación aquí.

 

El 8 de enero de 2018, el semanario estadounidense The Nation publicó un artículo que alertaba sobre la renovada voluntad de Estados Unidos de abandonar el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Entre las razones para justificar la decisión, se señalaba el rechazo de las autoridades estadounidenses al contenido de un informe sobre la extrema pobreza y los derechos humanos en EE.UU., realizado por el Relator Philip Alston, que iba a ser presentado en la sesión del Consejo del mes de junio. Efectivamente, en esta sesión, la número 38, sucedieron ambas cosas: Alston presentó el demoledor informe denunciando la realidad de la extrema pobreza en el autodenominado “país más rico del mundo”; y Estados Unidos comunicó el día 19 de junio su salida del máximo foro intergubernamental de Naciones Unidas para la protección de los derechos humanos.

Entre las razones expresadas por Nikki Haley, embajadora de los EE.UU. ante Naciones Unidas, y por Mike Pompeo, Secretario de Estado, para justificar su demoledora decisión de abandonar el Consejo, no se esgrimió expresamente el informe Alston. Sin embargo, pocos días después del anuncio, la embajadora Haley lanzó un ataque directo a su contenido, calificándolo como “engañoso y políticamente sesgado”, mientras afirmaba que “es absolutamente ridículo que Naciones Unidas examine la pobreza en América”.

Probablemente, el informe no es la causa principal de la enésima decisión de EE.UU. de minar la ya delicada situación del sistema de Naciones Unidas, pero tanto su contenido como el hecho de que exista un organismo internacional que decida examinar la política interna de Estados Unidos han abonado la senda que la Administración Trump ya tomó al abandonar organismos como la UNESCO o compromisos como el Acuerdo de París sobre cambio climático. Hay que recordar que tampoco es la primera vez que Estados Unidos toma la decisión de boicotear el Consejo. En 2009, bajo la administración de George Bush, el entonces embajador y hoy asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, criticado permanentemente por el Senado estadounidense, convenció a su presidente para no formar parte del Consejo, por razones muy similares a las que la embajadora Haley expresó el 19 de junio de 2018.

El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas fue creado en 2006, reemplazando a la antigua Comisión de Derechos Humanos. Su propia creación, orientada a superar las críticas y el deficiente funcionamiento de la Comisión, provocó el rechazo de Estados Unidos, Israel, Palaos y las Islas Marshall, y las abstenciones de Bielorrusia, Irán y Venezuela. El Consejo está compuesto por 47 Estados, elegidos por mayoría absoluta entre todos los Estados miembros de la ONU y repartidos de manera proporcional geográficamente, que se van renovando por tercios, y celebra tres sesiones ordinarias al año. En su seno se desarrollan procesos fundamentales para la promoción y protección de los Derechos Humanos en el mundo. Existen tanto mecanismos de monitoreo del cumplimiento de las obligaciones estatales, a través del sistema de informes o del Examen Periódico Universal; como iniciativas para el desarrollo de estos derechos y sus mecanismos de protección, entre las que destaca la negociación del Instrumento Jurídicamente Vinculante sobre Empresas transnacionales y otras empresas respecto de los Derechos Humanos (el llamado Binding Treaty).

El Consejo tiene, además, otras características que refuerzan su importancia. Por un lado, su carácter universal, es decir, el organismo monitorea el cumplimiento de los Derechos Humanos de todos los países, no solo de sus miembros. Esto implica, evidentemente, que la decisión de Estados Unidos no va a evitar que el Consejo lo siga supervisando. Por otro lado, es importante recordar el papel fundamental que la sociedad civil y sus organizaciones está jugando en el Consejo, participando de manera tanto formal como informal en sus sesiones y en los distintos grupos de trabajo creados en su seno.

Aun cuando la salida de Estados Unidos no implica la ruptura con sus obligaciones respecto de los Derechos Humanos (formalmente), la decisión supone la clara voluntad de realizar un ataque directo a la labor de este organismo y muy en particular a algunas de las líneas de actuación, tanto respecto de Israel como de las empresas trasnacionales, los acuerdos de inversión o, entre otras cuestiones, las políticas de austeridad y su conexión con la pobreza.

El gobierno de Estados Unidos ha justificado su decisión deslegitimando gravemente al Consejo. Pompeo lo calificó entre otras cosas como “un pobre defensor de los Derechos Humanos”, y señaló que su comportamiento es un continuo “ejercicio de vergonzosa hipocresía, donde los peores abusos son ignorados y donde se sientan los peores violadores”. El Secretario de Seguridad hizo gala de su habitual patriotismo, afirmando que Estados Unidos “no aceptará lecciones de órganos e instituciones hipócritas”.

En una línea similar, Haley, que en 2016 había exigido una reforma del Consejo para asegurar la permanencia de su país, culpabilizó al resto de Estados de permitir que el organismo siguiera acogiendo en su seno a los países que “más vulneran los derechos humanos”. El fracaso del intento de reforma impulsado por EEUU, que no fue apoyado ni por sus propios aliados, permite, en palabras de la embajadora, que el Consejo continúe actuando de manera politizada y parcial, dejando escapar a los “regímenes más inhumanos del mundo” y “convirtiendo en chivos expiatorios a los países con estándares de derechos humanos positivos”. 

Evidentemente, con esta última frase, Haley se refería a Israel y al conjunto de resoluciones de denuncia de las violaciones del derecho internacional cometidas por Israel que han sido adoptadas por el Consejo, en cuyas reuniones ordinarias se mantiene de manera fija el conocido como “ítem 7”, es decir, la discusión acerca de la situación de los derechos humanos en Palestina y otros territorios árabes ocupados. En torno a este ítem, y a distintos grupo de trabajo, el Consejo ha encargado numerosos informes sobre las violaciones del derecho internacional cometidas por Israel, entre los que destacan el informe de la misión internacional independiente de investigación sobre las repercusiones de los asentamientos israelíes en los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales del pueblo palestino, o el más reciente informe sobre la creación de una base de datos de todas las empresas que participan en determinas actividades específicas relacionadas con los asentamientos israelíes en el Territorio Palestino Ocupado. 

Este último informe, presentado en la sesión 37 del Consejo de Derechos Humanos (marzo de 2018), señala cómo determinadas empresas, fundamentalmente de origen israelí y estadounidense, habían permitido, facilitado y aprovechado, directa e indirectamente, la construcción y el crecimiento de los asentamientos. Además, indica que el Gobierno de Israel fomenta activamente el desarrollo económico de los asentamientos, por ejemplo, designándolos como “zonas de prioridad nacional”, lo que permite a las empresas que operan en ellos beneficiarse de reducciones del precio de la tierra, subvenciones al desarrollo de infraestructuras, trato tributario preferencial o inmunidad frente a las leyes laborales relativas al trato de los trabajadores palestinos. Debe destacarse que la Oficina de Derechos Humanos de la ONU ha confirmado esta misma semana que Israel mantiene su política de negar el acceso del relator a los territorios palestinos de Gaza y Cisjordania y que no contesta a sus peticiones en este sentido. 

Junto con la preocupación por proteger a sus empresas, la crítica de Estados Unidos respecto de la actuación del Consejo llegó a su punto máximo en la sesión especial del 28 de mayo, centrada en el deterioro de la situación de los derechos humanos en  Palestina, y que adoptó desplegar de manera inmediata una comisión de investigación internacional, independiente y transparente, para cuantificar las violaciones cometidos por Israel en los ataques militares contra las protestas civiles de los últimos meses. Sólo votaron en contra Estados Unidos y Australia. 

Impugnación del sueño americano 

Más allá de esta cuestión, existen otros motivos que han provocado el enfado de Estados Unidos y entre ellos destaca el informe del profesor Alston, que es, en sí, una impugnación directa del “sueño americano”. En sus 22 páginas, el Relator aporta datos para evaluar la medida en que las políticas y los programas del Gobierno de los Estados Unidos relacionados con la extrema pobreza son compatibles con sus obligaciones en materia de derechos humanos. Entre otras cuestiones, el informe afirma que cerca de 40 millones de personas viven en situación de pobreza, 18,5 millones de pobreza extrema y 5,3 millones en condiciones de pobreza absoluta. Además, EEEUU registra la tasa de pobreza juvenil y de mortalidad de lactantes más alta de la OCDE, así como una menor longevidad y una mayor morbilidad. Los estadounidenses son también los ciudadanos con la tasa más alta del mundo de encarcelamiento y los índices más altos de desigualdad de los ingresos de los países occidentales, empeorada por la reducción tributaria de diciembre de 2017, que ascendió a 1,5 billones de dólares. A todo lo anterior, se suma que, en 2018, se concentra en los Estados Unidos más del 25% de los 2.208 multimillonarios de todo el mundo, entre los que se encuentra su presidente, Donald Trump. Otras críticas a la política interna estadounidense, como la realizada por el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, respecto de la política migratoria en general y de la práctica de separación forzada de niños de las familias inmigrantes que entran ilegalmente a través de su frontera con México, han aumentado el rechazo de Estados Unidos respecto de lo que califican una “injerencia en su soberanía”

Pero las razones tampoco acaban aquí. Una pequeña revisión del comportamiento de permanente confrontación y especial beligerancia respecto de otros temas en el seno del Consejo demuestra otra de las aristas del problema: Estados Unidos no quiere que se cuestione la impunidad de las empresas transnacionales. A modo de ejemplo de esta política proteccionista, puede recordarse cómo este país intentó boicotear el funcionamiento del Grupo de trabajo sobre empresas transnacionales y otras empresas respecto de los derechos humanos (el Grupo del Binding Treaty) en octubre de 2017. En la última reunión de aquella sesión, donde se estaban pactando las conclusiones, apareció una representación de Estados Unidos, que había estado totalmente ausente en los trabajos del Grupo, y pidió la terminación de los mismos y la disolución del grupo, con una torticera argumentación jurídica que no fue finalmente apoyada por los estados participantes. Una vez más, la protección de la impunidad de las empresas transnacionales marcaba la agenda de la superpotencia. 

Así, la salida de Estados Unidos puede también relacionarse con la voluntad de boicotear una línea que va fortaleciéndose en el seno del Consejo de Derechos Humanos respecto de la necesidad de denunciar las violaciones y actuar para asegurar el respeto de los derechos humanos por parte de las empresas. Así, lentamente (y con avances y retrocesos) se ha ido creando un acervo de resoluciones e informes que tratan, aun de manera indirecta, el problema de la impunidad de las empresas y la captura corporativa de los Estados como son, por ejemplo, los de la relatora sobre las formas contemporáneas de esclavitud, Urmila Bhoola; los de Olivier De Schutter, relator especial sobre el derecho a la alimentación que ha elaborado distintos informes sobre, entre otras cuestiones, el impacto de los tratados de inversión en los derechos humanos o los del experto independiente Pablo Bohoslavsky sobre las consecuencias de la deuda externa y las obligaciones financieras internacionales conexas de los Estados para el pleno goce de todos los derechos humanos, sobre todo los derechos económicos, sociales y culturales. La salida de Estados Unidos también responde, sin duda, a un rechazo del contenido de estos informes que se orientan a la protección de los derechos humanos y en particular de los sociales, derechos que, por cierto, Estados Unidos ha manifestado no reconocer como derechos de igual categoría que los políticos o civiles. 

Frente a los intentos del Consejo y del conjunto del sistema de Naciones Unidas por proteger (con sus luces y sombras, sin duda) los derechos humanos se alzan voces bárbaras como la de John Bolton, que ha expresado que Estados Unidos “no necesita consejos de la ONU u otros organismos internacionales acerca de cómo gobernarnos”; o como la de Benjamin Netanyahu, que elogió la “valiente” decisión de Estados Unidos, como “declaración inequívoca de que ya basta”. Evidentemente, ambos actores internacionales, dentro o fuera del Consejo, deben cumplir con sus obligaciones respecto del derecho internacional de los derechos humanos, pero una vez mas nos encontramos con el problema más antiguo del derecho internacional que se recrudece en los últimos tiempos: ¿cómo podemos imponer el respeto de estas obligaciones a una superpotencia gobernada por Trump? 

CTXT es un medio financiado, en gran parte, por sus lectores. Puedes colaborar con tu aportación aquí.

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí

Autora >

Adoración Guamán

Es profesora titular de derecho del trabajo en la Universitat de València y autora del libro TTIP, el asalto de las multinacionales a la democracia.

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí