1. Número 1 · Enero 2015

  2. Número 2 · Enero 2015

  3. Número 3 · Enero 2015

  4. Número 4 · Febrero 2015

  5. Número 5 · Febrero 2015

  6. Número 6 · Febrero 2015

  7. Número 7 · Febrero 2015

  8. Número 8 · Marzo 2015

  9. Número 9 · Marzo 2015

  10. Número 10 · Marzo 2015

  11. Número 11 · Marzo 2015

  12. Número 12 · Abril 2015

  13. Número 13 · Abril 2015

  14. Número 14 · Abril 2015

  15. Número 15 · Abril 2015

  16. Número 16 · Mayo 2015

  17. Número 17 · Mayo 2015

  18. Número 18 · Mayo 2015

  19. Número 19 · Mayo 2015

  20. Número 20 · Junio 2015

  21. Número 21 · Junio 2015

  22. Número 22 · Junio 2015

  23. Número 23 · Junio 2015

  24. Número 24 · Julio 2015

  25. Número 25 · Julio 2015

  26. Número 26 · Julio 2015

  27. Número 27 · Julio 2015

  28. Número 28 · Septiembre 2015

  29. Número 29 · Septiembre 2015

  30. Número 30 · Septiembre 2015

  31. Número 31 · Septiembre 2015

  32. Número 32 · Septiembre 2015

  33. Número 33 · Octubre 2015

  34. Número 34 · Octubre 2015

  35. Número 35 · Octubre 2015

  36. Número 36 · Octubre 2015

  37. Número 37 · Noviembre 2015

  38. Número 38 · Noviembre 2015

  39. Número 39 · Noviembre 2015

  40. Número 40 · Noviembre 2015

  41. Número 41 · Diciembre 2015

  42. Número 42 · Diciembre 2015

  43. Número 43 · Diciembre 2015

  44. Número 44 · Diciembre 2015

  45. Número 45 · Diciembre 2015

  46. Número 46 · Enero 2016

  47. Número 47 · Enero 2016

  48. Número 48 · Enero 2016

  49. Número 49 · Enero 2016

  50. Número 50 · Febrero 2016

  51. Número 51 · Febrero 2016

  52. Número 52 · Febrero 2016

  53. Número 53 · Febrero 2016

  54. Número 54 · Marzo 2016

  55. Número 55 · Marzo 2016

  56. Número 56 · Marzo 2016

  57. Número 57 · Marzo 2016

  58. Número 58 · Marzo 2016

  59. Número 59 · Abril 2016

  60. Número 60 · Abril 2016

  61. Número 61 · Abril 2016

  62. Número 62 · Abril 2016

  63. Número 63 · Mayo 2016

  64. Número 64 · Mayo 2016

  65. Número 65 · Mayo 2016

  66. Número 66 · Mayo 2016

  67. Número 67 · Junio 2016

  68. Número 68 · Junio 2016

  69. Número 69 · Junio 2016

  70. Número 70 · Junio 2016

  71. Número 71 · Junio 2016

  72. Número 72 · Julio 2016

  73. Número 73 · Julio 2016

  74. Número 74 · Julio 2016

  75. Número 75 · Julio 2016

  76. Número 76 · Agosto 2016

  77. Número 77 · Agosto 2016

  78. Número 78 · Agosto 2016

  79. Número 79 · Agosto 2016

  80. Número 80 · Agosto 2016

  81. Número 81 · Septiembre 2016

  82. Número 82 · Septiembre 2016

  83. Número 83 · Septiembre 2016

  84. Número 84 · Septiembre 2016

  85. Número 85 · Octubre 2016

  86. Número 86 · Octubre 2016

  87. Número 87 · Octubre 2016

  88. Número 88 · Octubre 2016

  89. Número 89 · Noviembre 2016

  90. Número 90 · Noviembre 2016

  91. Número 91 · Noviembre 2016

  92. Número 92 · Noviembre 2016

  93. Número 93 · Noviembre 2016

  94. Número 94 · Diciembre 2016

  95. Número 95 · Diciembre 2016

  96. Número 96 · Diciembre 2016

  97. Número 97 · Diciembre 2016

  98. Número 98 · Enero 2017

  99. Número 99 · Enero 2017

  100. Número 100 · Enero 2017

  101. Número 101 · Enero 2017

  102. Número 102 · Febrero 2017

  103. Número 103 · Febrero 2017

  104. Número 104 · Febrero 2017

  105. Número 105 · Febrero 2017

  106. Número 106 · Marzo 2017

  107. Número 107 · Marzo 2017

  108. Número 108 · Marzo 2017

  109. Número 109 · Marzo 2017

  110. Número 110 · Marzo 2017

  111. Número 111 · Abril 2017

  112. Número 112 · Abril 2017

  113. Número 113 · Abril 2017

  114. Número 114 · Abril 2017

  115. Número 115 · Mayo 2017

  116. Número 116 · Mayo 2017

  117. Número 117 · Mayo 2017

  118. Número 118 · Mayo 2017

  119. Número 119 · Mayo 2017

  120. Número 120 · Junio 2017

  121. Número 121 · Junio 2017

  122. Número 122 · Junio 2017

  123. Número 123 · Junio 2017

  124. Número 124 · Julio 2017

  125. Número 125 · Julio 2017

  126. Número 126 · Julio 2017

  127. Número 127 · Julio 2017

  128. Número 128 · Agosto 2017

  129. Número 129 · Agosto 2017

  130. Número 130 · Agosto 2017

  131. Número 131 · Agosto 2017

  132. Número 132 · Agosto 2017

  133. Número 133 · Septiembre 2017

  134. Número 134 · Septiembre 2017

  135. Número 135 · Septiembre 2017

  136. Número 136 · Septiembre 2017

  137. Número 137 · Octubre 2017

  138. Número 138 · Octubre 2017

  139. Número 139 · Octubre 2017

  140. Número 140 · Octubre 2017

  141. Número 141 · Noviembre 2017

  142. Número 142 · Noviembre 2017

  143. Número 143 · Noviembre 2017

  144. Número 144 · Noviembre 2017

  145. Número 145 · Noviembre 2017

  146. Número 146 · Diciembre 2017

  147. Número 147 · Diciembre 2017

  148. Número 148 · Diciembre 2017

  149. Número 149 · Diciembre 2017

  150. Número 150 · Enero 2018

  151. Número 151 · Enero 2018

  152. Número 152 · Enero 2018

  153. Número 153 · Enero 2018

  154. Número 154 · Enero 2018

  155. Número 155 · Febrero 2018

  156. Número 156 · Febrero 2018

  157. Número 157 · Febrero 2018

  158. Número 158 · Febrero 2018

  159. Número 159 · Marzo 2018

  160. Número 160 · Marzo 2018

  161. Número 161 · Marzo 2018

  162. Número 162 · Marzo 2018

  163. Número 163 · Abril 2018

  164. Número 164 · Abril 2018

  165. Número 165 · Abril 2018

  166. Número 166 · Abril 2018

  167. Número 167 · Mayo 2018

  168. Número 168 · Mayo 2018

  169. Número 169 · Mayo 2018

  170. Número 170 · Mayo 2018

  171. Número 171 · Mayo 2018

  172. Número 172 · Junio 2018

  173. Número 173 · Junio 2018

  174. Número 174 · Junio 2018

  175. Número 175 · Junio 2018

  176. Número 176 · Julio 2018

  177. Número 177 · Julio 2018

  178. Número 178 · Julio 2018

  179. Número 179 · Julio 2018

  180. Número 180 · Agosto 2018

  181. Número 181 · Agosto 2018

  182. Número 182 · Agosto 2018

  183. Número 183 · Agosto 2018

  184. Número 184 · Agosto 2018

  185. Número 185 · Septiembre 2018

  186. Número 186 · Septiembre 2018

  187. Número 187 · Septiembre 2018

  188. Número 188 · Septiembre 2018

  189. Número 189 · Octubre 2018

  190. Número 190 · Octubre 2018

  191. Número 191 · Octubre 2018

  192. Número 192 · Octubre 2018

  193. Número 193 · Octubre 2018

  194. Número 194 · Noviembre 2018

  195. Número 195 · Noviembre 2018

  196. Número 196 · Noviembre 2018

  197. Número 197 · Noviembre 2018

  198. Número 198 · Diciembre 2018

  199. Número 199 · Diciembre 2018

  200. Número 200 · Diciembre 2018

  201. Número 201 · Diciembre 2018

  202. Número 202 · Enero 2019

  203. Número 203 · Enero 2019

  204. Número 204 · Enero 2019

  205. Número 205 · Enero 2019

  206. Número 206 · Enero 2019

  207. Número 207 · Febrero 2019

  208. Número 208 · Febrero 2019

  209. Número 209 · Febrero 2019

  210. Número 210 · Febrero 2019

  211. Número 211 · Marzo 2019

  212. Número 212 · Marzo 2019

  213. Número 213 · Marzo 2019

  214. Número 214 · Marzo 2019

  215. Número 215 · Abril 2019

  216. Número 216 · Abril 2019

  217. Número 217 · Abril 2019

  218. Número 218 · Abril 2019

  219. Número 219 · Mayo 2019

  220. Número 220 · Mayo 2019

  221. Número 221 · Mayo 2019

  222. Número 222 · Mayo 2019

  223. Número 223 · Mayo 2019

  224. Número 224 · Junio 2019

  225. Número 225 · Junio 2019

  226. Número 226 · Junio 2019

  227. Número 227 · Junio 2019

  228. Número 228 · Julio 2019

  229. Número 229 · Julio 2019

  230. Número 230 · Julio 2019

  231. Número 231 · Julio 2019

  232. Número 232 · Julio 2019

  233. Número 233 · Agosto 2019

  234. Número 234 · Agosto 2019

  235. Número 235 · Agosto 2019

  236. Número 236 · Agosto 2019

  237. Número 237 · Septiembre 2019

  238. Número 238 · Septiembre 2019

  239. Número 239 · Septiembre 2019

  240. Número 240 · Septiembre 2019

  241. Número 241 · Octubre 2019

  242. Número 242 · Octubre 2019

  243. Número 243 · Octubre 2019

  244. Número 244 · Octubre 2019

  245. Número 245 · Octubre 2019

  246. Número 246 · Noviembre 2019

  247. Número 247 · Noviembre 2019

  248. Número 248 · Noviembre 2019

  249. Número 249 · Noviembre 2019

  250. Número 250 · Diciembre 2019

  251. Número 251 · Diciembre 2019

  252. Número 252 · Diciembre 2019

  253. Número 253 · Diciembre 2019

  254. Número 254 · Enero 2020

  255. Número 255 · Enero 2020

  256. Número 256 · Enero 2020

  257. Número 257 · Febrero 2020

  258. Número 258 · Marzo 2020

  259. Número 259 · Abril 2020

  260. Número 260 · Mayo 2020

  261. Número 261 · Junio 2020

  262. Número 262 · Julio 2020

  263. Número 263 · Agosto 2020

  264. Número 264 · Septiembre 2020

  265. Número 265 · Octubre 2020

  266. Número 266 · Noviembre 2020

  267. Número 267 · Diciembre 2020

  268. Número 268 · Enero 2021

  269. Número 269 · Febrero 2021

  270. Número 270 · Marzo 2021

  271. Número 271 · Abril 2021

  272. Número 272 · Mayo 2021

  273. Número 273 · Junio 2021

  274. Número 274 · Julio 2021

  275. Número 275 · Agosto 2021

  276. Número 276 · Septiembre 2021

  277. Número 277 · Octubre 2021

  278. Número 278 · Noviembre 2021

  279. Número 279 · Diciembre 2021

  280. Número 280 · Enero 2022

  281. Número 281 · Febrero 2022

  282. Número 282 · Marzo 2022

  283. Número 283 · Abril 2022

  284. Número 284 · Mayo 2022

  285. Número 285 · Junio 2022

  286. Número 286 · Julio 2022

  287. Número 287 · Agosto 2022

  288. Número 288 · Septiembre 2022

  289. Número 289 · Octubre 2022

  290. Número 290 · Noviembre 2022

  291. Número 291 · Diciembre 2022

  292. Número 292 · Enero 2023

  293. Número 293 · Febrero 2023

  294. Número 294 · Marzo 2023

  295. Número 295 · Abril 2023

  296. Número 296 · Mayo 2023

  297. Número 297 · Junio 2023

  298. Número 298 · Julio 2023

  299. Número 299 · Agosto 2023

  300. Número 300 · Septiembre 2023

  301. Número 301 · Octubre 2023

  302. Número 302 · Noviembre 2023

  303. Número 303 · Diciembre 2023

  304. Número 304 · Enero 2024

  305. Número 305 · Febrero 2024

  306. Número 306 · Marzo 2024

CTXT necesita 15.000 socias/os para seguir creciendo. Suscríbete a CTXT

La privatización era esto

El escándalo de las residencias coloca a Díaz Ayuso contra las cuerdas

Más de 200 familias preparan querellas contra la presidenta, el consejero de Sanidad y directores de centros de mayores mientras la fiscalía investiga la actividad de 40 geriátricos, entre ellos los 14 intervenidos por la Comunidad

Gorka Castillo Madrid , 27/05/2020

<p>Isabel Díaz Ayuso visita el Hospital de Guadarrama junto con el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero (2019).</p>

Isabel Díaz Ayuso visita el Hospital de Guadarrama junto con el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero (2019).

Comunidad de Madrid

En CTXT podemos mantener nuestra radical independencia gracias a que las suscripciones suponen el 70% de los ingresos. No aceptamos “noticias” patrocinadas y apenas tenemos publicidad. Si puedes apoyarnos desde 3 euros mensuales, suscribete aquí

“¿Qué resulta más escandaloso: los 6.000 muertos en las residencias de Madrid o que la empresa Clece, una de las que más ganó el pasado año –280 millones de euros– gestionando geriátricos, pida que el gobierno autonómico asuma las pérdidas que le ha ocasionado la pandemia?”. Quien así de contundente se expresa es Antonia –nombre ficticio–, una de las más de 200 personas que hoy preparan denuncias contra la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso; el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, y los directores de 26 residencias madrileñas por presuntos delitos de homicidio imprudente, trato vejatorio, prevaricación y denegación de auxilio. La decisión de esconder su verdadero nombre es tan firme como la de preservar la identidad de su madre, residente en uno de los innumerables centros de personas mayores que fueron arrasados por la pandemia a principios de marzo.

El motivo de tanto secretismo es que teme que su denuncia puede ocasionar algún tipo de represalia contra su madre. No se fía de los responsables del centro madrileño “cuya gestión me resultó muy negligente y angustiosa en los peores momentos de la pandemia”. Así, que de las fotos ni hablar. Quiere protegerla y volver a verla tras dos meses y medio de aislamiento. Lo relevante ahora para Antonia es el proceso judicial en el que se ha comprometido, “que lo conozcan los miles de afectados que ahora no se atreven a dar el paso”, añade.

Entre marzo y abril, al menos uno de cada 10 residentes falleció y 4 de cada 10 trabajadores enfermaron en Madrid

A su descontento, y a la tenacidad de otras personas en situaciones aún más dolorosas, se debe la única contabilidad que hoy sirve para aproximarse a la devastación que ha dejado el paso el torbellino viral en las residencias de mayores. Datos que perfilan los estragos causados por el virus entre las 48.758 personas que viven en las 475 instalaciones madrileñas y empezar a depurar los presuntos delitos cometidos durante la pandemia: al menos uno de cada 10 residentes falleció y 4 de cada 10 trabajadores enfermaron en Madrid. Entre marzo y abril. La mayor catástrofe humana de la democracia. La cadena SER habla ya de 19.200 muertos en las residencias españolas: casi 6.000 en Madrid y 4.000 en Catalunya.

Organizaciones sociales, sindicatos, enfermeras, auxiliares y familiares ajustan a estas horas el foco. La Comunidad madrileña solo ha medicalizado 14 centros, frente a los 209 expedientes abiertos en el otro foco nacional de la infamia que es Catalunya, y las 40 investigaciones abiertas por la Fiscalía.

En abril, la administración regional madrileña intervino la Fundación Reina Sofía Alzheimer, dirigida por la empresa Clece, de Florentino Pérez; la residencia de Monte Hermoso, que ha registrado 49 muertos y 32 trabajadores enfermos; la de Usera, Mirasierra, Alcalá de Henares y Leganés de DomusVi, una fondo francés con capital británico que tributa en el paraíso fiscal de Jersey, donde fallecieron 118 personas y se tramitaron más de 50 bajas médicas entre el personal contratado; o la que el grupo Vitalia gestiona en Leganés, 84 muertos y 75 enfermos.

Pero hay más. Entre las grupos más sancionados y penalizados* durante los últimos cinco años, tal y como aparece reflejado en el portal de transparencia de la Comunidad, están Orpea, 64 multas por valor de más de medio millón de euros; Sanitas Mayores, 18 amonestaciones por no cumplir las condiciones pactadas en los pliegos de cuatro residencias; Valdeluz, “por incumplir la debida atención sanitaria a usuarios” y Los Nogales, sobre todo después de que saliera a luz un vídeo donde trabajadores presuntamente maltrataban a una de las residentes. Este centro acumula las dos penalizaciones más cuantiosas registradas en el último lustro. Otros de los grandes fondos que siempre ha estado en el ojo de la tormenta residencial es Aralia, propiedad del constructor José Luis Ulibarri, imputado en la Gürtel y la Púnica. A juicio de trabajadores y familiares consultados por CTXT, “un desastre sin paliativos”. 

José Luis González es uno de los tres letrados que la semana pasada presentaron ante el Juzgado de Instrucción número 39 de Madrid la primera de las querellas interpuestas contra los presuntos responsables de este desatino. Son diversos testimonios de familiares y trabajadores contra la gestión de 11 directores de residencias, que serán ampliadas a 20 en los próximos días, ubicadas en la ciudad de Madrid. La lista de agraviados no ha dejado de multiplicarse en toda la región desde que la iniciativa se hizo pública. Esta semana, por ejemplo, presentarán el segundo bloque judicial en Alcorcón y Leganés, dos de los municipios madrileños donde el virus ha dejado un mayor rastro de desolación. El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha reaccionado acusando al Ejecutivo central de “mirar para otro lado” a la hora de gestionar el brote letal de coronavirus declarado en cientos de residencias al tiempo que destaca que en Leganés –donde en tres residencias dirigidas por Vitalia, DomusVi y Nuestra Señora de Butarque se contabilizaron casi 200 fallecimientos– “pudimos salvar entre 160 y 180 vidas de mayores”.

Para el abogado José Luis González, “más allá de la discusión política, no hay duda alguna de que durante el estado de alarma las competencias de Sanidad y de los servicios sociales siguieron en todo momento en manos de las comunidades autónomas. Así lo especifican el real decreto dictado en marzo, la norma de ordenación sanitaria, la ley de servicios sociales y el decreto que regula el funcionamiento de las residencias”, asegura.

Pero, ante esta andanada de explicaciones de la presidenta madrileña en la Asamblea regional, ¿qué pirueta jurídica está utilizando para precipitar la responsabilidad sobre las espaldas del Gobierno central? Para González no es ningún misterio: escurrir el bulto. “El artículo 6 y el 12 del decreto del estado de alarma dice todo lo contrario de lo que defiende Díaz Ayuso. Dota de más competencias, refuerza a las comunidades autónomas al centralizar bajo su mando todo lo que tiene que ver con la sanidad privada. Y esa conclusión no está abierta a una interpretación política ni a la que pueda hacer un abogado que defiende los intereses de su cliente. En absoluto. Hay dos autos del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, uno referido a las residencias en Alcorcón y otro a las de Leganés, donde especifica que las competencias son de ámbito autonómico y que quien tenía que haberlas medicalizado e intervenido era la Comunidad de Madrid”, sentencia el letrado.

La administración regional no ha construido ningún centro para personas mayores desde 1983

El origen del problema, según el miembro de la Unión de Plataformas en Defensa de los Servicios Sociales y Diversidad Funcional de Madrid, Javier Garzón, hay que buscarlo en el sistema de control público que se ha realizado de las 475 residencias. El gobierno de Díaz Ayuso “sólo controla directamente 25 centros, el 5,8% del total y 6.200 plazas mientras financia a empresas privadas para que gestionen 22.000 plazas”. La administración regional no ha construido ningún centro para personas mayores desde 1983, ya que los 25 en los que mantiene la titularidad fueron transferidos al conformarse la autonomía. Y 16 de estas instalaciones tienen más de 40 años.

Diversos estudios sobre la situación de los servicios sociales llevan alertando de que las residencias de ancianos se han convertido en un lucrativo negocio en España. Especialmente para empresarios como Florentino Pérez, que semanas antes de desatarse la pandemia anunció la apertura en 2021 del mayor geriátrico de Lleida con el nombre de “Clece Vitam Ponent”; o SACYR, cuyo presidente Manuel Manrique recibió el pasado año una retribución de 8,16 millones de euros por el desempeño de su cargo.

Páginas web de compra y venta como Milanuncios reflejan hoy cómo la brújula de estas empresas se ha trasladado al sector residencial.

 

“La lista es larga: Intermediate Capital Group, CVC, Orpea, denunciada por sus trabajadores por ocultar las muertes de residentes en uno de sus centros de Madrid; DomusVi, Sanitas o HM Hospitales, que con este negocio cierran el círculo de la asistencia sanitaria privada. Las privatizaciones han precarizado el sector de cara a aumentar la tasa de beneficios de estas grandes empresas”, explica Carmen Turrero, sindicalista y autora de varias investigaciones sobre este tema.

Desde que en 2012 el Gobierno central tomó la decisión de congelar el presupuesto que dedicaba a la dependencia, la dependencia se ha convertido en la veta del gran negocio para los grandes fondos de capital. La Comunidad de Madrid dejó de percibir 50 millones de euros cada año de financiación estatal y lo compensó cediendo aún más la gestión a estas empresas. “La consecuencia de todo esto es que de las 48.758 plazas que hay en la Comunidad, las empresas privadas gestionan 42.500 plazas, el 87% del total, y además con la garantía de que un tercio de su financiación procede de la administración autonómica”, revela Javier Garzón. Ahora, el Estado sólo aporta el 16,3% del dinero, la Comunidad el 63,8% y los residentes el 19,9% restante, es decir, unos 253 millones de euros anuales. Aquellos que tienen plaza en una residencia pública abonan un porcentaje de su pensión, alrededor de 700 euros al mes de media, mientras que el precio de una plaza sin ayuda ronda los 2.000 euros mensuales. El resultado es que existe un déficit de plazas públicas para mayores. Algunos estudios apuntan que en Madrid hay más de 28.000 personas en lista espera, 14.000 de ellos con grados severos de dependencia. Cerca de 3.000 llevan en esta situación más de un año. “Según estos números, que consideramos muy exhaustivos, sería necesario construir unas 50 nuevas residencias en la Comunidad, lo que supondría una inversión pública de unos 500 millones de euros”, indica Garzón.

Existe un déficit de plazas públicas para mayores. Algunos estudios apuntan que en Madrid hay más de 28.000 personas en lista espera

La situación laboral de los 25.000 trabajadores, un 90% de ellos mujeres, siempre ha sido otro frente de la batalla. El Defensor del Pueblo ya avisó en su informe de 2018 de que Madrid “debía estudiar la posibilidad de revisar al alza las ratios mínimas” pero las cifras no han variado. Mientras la media por enfermera en el conjunto del Estado es de 109 pacientes, en Madrid se eleva, en algunos casos, a 261. El sueldo mensual de una cuidadora no llega a los 1.000 euros y el de una enfermera es uno de los más bajos de España, si se compara el Convenio de Dependencia autonómico con otros convenios del sector sanitario del país. Ni siquiera es obligatoria la presencia permanente de un médico. Durante el peor momento de la pandemia se contabilizaron 6.000 bajas por enfermedad que, en su mayoría, quedaron vacantes hasta que la amenaza comenzó a remitir. “La precariedad siempre ha sido el comportamiento habitual en este negocio”, concluye Garzón.

La madre de Antonia, por ejemplo, se encuentra en uno de los 18 centros públicos gestionados por empresas privadas que hay en Madrid. Allí murieron dos ancianos por el Covid-19 entre marzo y abril. Ella tuvo más suerte y aquí está, aunque nadie sabe a ciencia cierta si llegó a estar infectada. “Es una mujer muy sociable que tiene un trato cordial con el resto de pacientes y con el personal. Y como está contenta en esa residencia me dice que no cuente nada, que me calle”, añade su hija, que ya descuenta los días del calendario para poderla visitar. Sin embargo, a Antonia le cambia el tono de la voz cuando le preguntan por la experiencia vivida en otro centro totalmente privatizado en que estuvo su madre. “Resultó un horror”, sentencia sin ambages. Quizá por eso le irrita tanto escuchar que los responsables autonómicos no alterarán su modelo residencial ni que permitirán que nadie dicte los hábitos asistenciales de los mayores madrileños. “No hay derecho a que digan esas cosas cuando todos sabemos que los han tenido abandonados, sobre todo en las residencias privadas. Es un escándalo. Y te diré más: Creo que si tengo cerca a Díaz Ayuso cuando dijo aquello sobre la conveniencia o no de trasladar a ancianos a hospitales la abofeteo”. Y con esa sentencia se despide Antonia, apretando los puños y con la certeza de que costará destapar los motivos que desencadenaron el infierno que han vivido las residencias.

----------------

*Fe de errores: en la primera versión de este reportaje se decía: Entre las residencias investigadas hoy están 10 del grupo Orpea, 9 de Sanitas, 7 de Amavir y 3 de Mensajeros de la Paz. 

“¿Qué resulta más escandaloso: los 6.000 muertos en las residencias de Madrid o que la empresa Clece, una de las que más ganó el pasado año –280 millones de euros– gestionando geriátricos, pida que el gobierno autonómico asuma las pérdidas que le ha ocasionado la pandemia?”. Quien así de contundente se expresa es...

Este artículo es exclusivo para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí

Autor >

Suscríbete a CTXT

Orgullosas
de llegar tarde
a las últimas noticias

Gracias a tu suscripción podemos ejercer un periodismo público y en libertad.
¿Quieres suscribirte a CTXT por solo 6 euros al mes? Pulsa aquí

Artículos relacionados >

Deja un comentario


Los comentarios solo están habilitados para las personas suscritas a CTXT. Puedes suscribirte aquí